2 ¿Es posible saber con certeza si Dios existe?

2 ¿Es posible saber con certeza si Dios existe?

Eduardo:

Arranquemos con lo más básico. ¿Cómo sabe uno si Dios existe o no?

Rafael:

Para empezar, creo que mi primera respuesta te parecerá un poco extraña. Yo creo que se requiere más FE creer que NO EXISTE Dios, que creer que sí existe.

Eduardo:

Perdóname. ¿Te oí bien? Voy a necesitar una explicación un poco más amplia.

Rafael:

Bueno, el problema con afirmar la NO EXISTENCIA de Dios, es que requiere que uno sepa TODO para afirmar eso. Por ejemplo, imagina un círculo del tamaño del timón de tu auto, y que el mismo representa TODO el conocimiento que hay en el universo. La pregunta clave es: ¿Qué porción de este universo de conocimientos poseemos tu o yo? Creo que la mayoría de nosotros señalaremos nuestros conocimientos con un punto pequeño dentro del círculo del timón. Y este es el caso del ateo también. Pero, a pesar de sus limitaciones de conocimientos él afirma que sabe que no puede existir un Dios. ¿Cómo puede él SABER que no hay Dios si al mismo tiempo admite que sabe solo una pequeña porción de todos los conocimientos en el universo? ¿No es posible que Dios exista fuera de sus conocimientos y experiencia?
Así que alguien que toma la postura de que NO PUEDE EXISTIR UN DIOS, está expresando una FE enorme sencillamente al admitir lo poco que conocemos en realidad. ¿No es posible, más bien, que existe un Dios fuera de nuestros conocimientos limitados? Creo que la respuesta a esa pregunta tiene que ser “sí”.

Eduardo:

Está bien, veo la lógica de tu explicación. Pero ¿qué tal si tomo la postura de en medio? 0 sea, puede haber un Dios y puede que no. Bueno, sencillamente no lo sé.

Rafael:

Si lo pones así, te estarías moviendo del ateísmo al agnosticismo: de tener la seguridad de que NO EXISTE DIOS a solo admitir que sabemos si existe. Creo que el primer paso a responder a esa postura es hacernos la pregunta, ¿Qué evidencias hay a favor de la existencia de Dios?

Eduardo:

Me parece bien. ¿De qué tipo de evidencias hablas?

Rafael:

La manera más sencilla que conozco para ilustrar la evidencia que señala la existencia de Dios es la siguiente. Si miras mi reloj y me comentas que te parece bonito y me preguntas “¿dónde lo compraste?”, y yo te respondo, “No lo vas a creer, pero un buen día hubo una explosión en una fábrica y de repente como resultado de esta explosión, salió este reloj”.

Eduardo:

Tienes toda la razón, no te creo.

Rafael:

Sencillamente, una cosmovisión es lo que responde a nuestras inquietudes más grandes en la vida. Hablo de las preguntas como ¿de dónde venimos? ¿Por qué estamos aquí? ¿Cómo debemos vivir ahora? y, por su puesto, ¿Qué nos pasará cuando muramos?

Eduardo:

Claro, probablemente lo que dirías en seguida es algo como “¡esto es ridículo!” “Tú tienes un reloj bellísimo que marca el tiempo con una precisión extraordinaria todo el año. ¡No fue un accidente! Es obvio que alguien diseñó este reloj.”
Ahora. Si observamos a nuestro alrededor, vemos una increíble armonía y orden en el mundo natural, y si tomamos en cuenta las cosas que hemos descubierto por medio de la ciencia, encontramos un mundo maravillosamente complejo y bello. Me parece que no tiene mucho sentido pensar que todo esto es resultado de caos y accidente.
Por lo menos para mí no tiene sentido. Por otro lado, la evidencia prodigiosa de DISEÑO parece señalar que hay un DISEÑADOR.
Además de la evidencia de orden en el mundo creado que indica que deber haber una CAUSA INTELIGENTE detrás, creo también que todos tenemos un sentido del Bien y Mal DENTRO DE nosotros mismos. La pregunta es, ¿de dónde viene este sentido interno del bien y mal? No se puede dar una LEY sin un DADOR de la ley, algún ser que nos lo haya dado. Todo esto señala hacia un Dios.
Consideremos que, si podemos observar detenidamente al universo exterior por medio de un telescopio, o por el otro lado, investigar por medio de un microscopio, encontramos evidencias de un DISEÑADOR. Si miramos todas estas evidencias juntas, hay una serie de pistas claves que proveen una evidencia abrumadora sobre la necesidad de que exista un CREADOR, un DIOS detrás de nuestro universo.
Debo añadir una cosa más, que en realidad es muy sencilla. Si tomamos en cuenta que la evidencia señala en esa dirección -que existe un Dios-, tenemos todo por ganar y nada que perder al seguir esa evidencia. Es decir, si resulta que al final estamos equivocados, no hemos perdido nada. Pero si resulta que tenemos la razón, habremos ganado TODO. Por otro lado, si decidimos NO seguir las evidencias a favor de la existencia de Dios, no tenemos nada por ganar y todo que perder. Aun si tenemos la razón al rechazar a Dios, no tenemos nada que ganar, por no creer. Y si rechazamos a Dios y demasiado tarde nos damos cuenta de que SÍ hay un Dios, por supuesto habremos perdido TODO.

Acabas de escuchar la versión resumida.
Sin embargo Eduardo y Rafael han tocado otro temas muy relevantes, te invito a escuchar el dialogo extendido.